Después de la larga espera, el misterioso sobre llegó al buzón azul con detalles en plata del número 28 de Hanway street.La mucama fue quién dio con él cuando fue a recoger la correspondencia como todas las mañanas, aproximadamente a las 10 am.La llegada del sobre no fue misteriosa (ya que hace semanas se suponía que tendría que haber llegado) pero su contenido si.
Al abrirlo, Anna sacó de él las fotos de la graduación de su hija mayor y comenzó a verlas detenidamente.En la primera estaba su hija, Amelie con su toga color petróleo en el jardín de su casa, contrastando con el rojo furioso de las tejas colocadas hace unos meses atrás, en la siguiente esta Amelie con sus mejores amigas posando con sus diplomas en mano, en la tercera se encuentran todos los egresados sobre el escenario decorado para la ocasión con guirnaldas y algunos globos a tono, peor la que más le llamó la atención fue la última en la que se encontraban ella, Amelie y su esposo.En ella el contralmirante tenía la mirada perdida, sin la vivacidad característica que siempre le daba a su cara un dejo de jovialidad a pesar de su avanzada edad, pero no fue eso lo que más la preocupó, sino que lo más llamativo eran unas manchas que aparecían en su cara...como musgo,como algo putrefacto.Después de observarla unos minutos llegó a la conclusión de que debía ser algún defecto del revelado y siguió con sus quehaceres.
Lo que nunca se dió cuenta, fue que el sobre decía 12/06/1989, cuando en realidad fue recibido el día 02/06/1989.
Transcurrieron los días con una extraña normalidad, hasta que finalmente llegó la mañana del 12 de Junio de mil novecientos ochenta y nueve.Una mañana típica, un amanecer típico, unos huevos revueltos típicos, una tetera con té en hebras típica...lo único atípico fue que el contralmirante jamás despertó.
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Wow!
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